Después de 34 años de servicio como agente de la Policía Local de Calvià, Miguel Flexas Borràs se despidió ayer de sus compañeros, para pasar a partir de hoy a segunda actividad sin destino.
Flexas recibió ayer el homenaje de sus compañeros, quienes a lo largo de la mañana se fueron presentando en el cuartel de la Policía Local a medida que acababan su servicio o antes de iniciarlo.
El agente, que se mostró ayer muy emocionado, destacó que es el último agente de la promoción de 1971 que seguía en activo, y recordó cómo era ser «guardia» hace 34 años. «En todo Calvià sólo éramos 10, y teníamos un Land Rover y dos motos para cubrir el municipio», recordó el agente, contrastando con los cerca de 150 policías que patrullan en el municipio actualmente.
«Entonces éramos como policías de barrio, y hacíamos de chóferes de los bomberos, de ambulancias, del coche fúnebre y hasta del alcalde», indicó Flexas, quien destaca el «compañerismo» entre los agentes de hace años. «En este tiempo he llegado a conocer seis cuarteles distintos», señaló.
El policía recibió varios regalos a lo largo de la mañana, entre ellos un reloj con una inscripción y un álbum de fotos de toda su carrera como agente.