Un delincuente que cubría su rostro con un pasamontañas y que iba armado con una pistola asaltó en la tarde de ayer la sucursal bancaria de Sa Nostra en la calle Capità Ramonell i Boix, en la barriada palmesana de El Molinar. El banco, pese a ser por la tarde, había abierto sus puertas a los clientes porque era jueves. Sobre las 19.15 horas un sujeto armado irrumpió en el local y encañonó a los dos clientes y a los empleados, exigiendo en un castellano defectuoso que le entregaran todo el dinero disponible en esos momentos. La cantidad no era muy elevada, parece ser que no superaba los 4.000 euros, pero los encargados no dudaron en entregársela porque el delincuente estaba muy nervioso y no sabían si el arma era simulada o, por el contrario, era real.
Tras hacerse con el botín, el desconocido apuntó de nuevo a los presentes, conminándoles a que no se movieran, y abandonó a la carrera el banco. Un testigo presenció como corría unos metros y después se subía a un coche. Lo que no se sabe es si había alguien esperándole en el turismo o si lo puso en marcha él mismo. Acto seguido, los empleados activaron la señal de alarma y varias patrullas del Cuerpo Nacional de Policía se desplazaron hasta El Molinar, donde se entrevistaron con los testigos. El atracador vestía de forma desaliñada y podría ser rumano o de un país del Este, según apreciaron los testigos por su pronunciación.
Los agentes de la Policía Judicial se hicieron con las cintas de vídeo de seguridad del banco, para poderlas visionar con detenimiento en busca de indicios sobre la identidad del atracador. Los investigadores no descartan que se trate de un delincuente común, de ahí su interés en ocultar su identidad, y tras el atraco dieron una batida por los alrededores de El Molinar, que no fue positivo. El poblado de Son Banya también fue vigilado, por si el sospechoso se dirigía allí para comprar droga.