PARIS-EFE
Al menos 13 personas murieron y otras 10 resultaron heridas graves
ayer al ceder una pasarela de acceso al lujoso transatlántico
«Queen Mary 2» en los astilleros de Saint-Nazaire (oeste francés).
La labor de rescate de las víctimas mortales, entre las que puede
haber niños, continuaba en el lugar del siniestro a la hora de
redactar esta información. El drama ocurrió durante una visita al
lujoso crucero, el más grande del mundo, atracado en los Astilleros
del Atlántico. Se desconoce por qué se derrumbó la pasarela. Las
víctimas son miembros de las familias del personal que trabajó en
la construcción del «Queen Mary 2».
Considerado como el mayor crucero del mundo, con sus 345 metros de largo, 41 de ancho y 72 de alto, y 150.000 toneladas de peso, debe ser entregado al armador británico Cunard el mes próximo, con vistas a su viaje inaugural el 12 de enero desde Southampton (Reino Unido) hasta Florida (EEUU). Valorado en unos 800 millones de dólares, este gigante de los mares cuenta con 4 motores diesel y 2 turbinas de gas, que deben generar los 154.000 caballos de potencia capaces de impulsarlo a 30 nudos de velocidad (casi 56 kilómetros por hora), según el constructor, Alstom Marine.
El punto fuerte del «QM2» no es la rapidez sino el lujo: 1.310 camarotes, la mayoría de ellos con balcón, cinco piscinas, ocho jacuzzis, un gran teatro de 1.000 plazas y planetario. Todo ello, adornado con obras de arte valoradas en 5 millones de dólares.