En un emotivo acto, en el que acudieron unas 300 personas, se descubrió ayer una placa con la que se dedica una calle en la localidad de Calvià a Vicente Chinchilla, el trabajador de las brigadas municipales que murió en acto de servicio durante el temporal que azotó la Isla de Mallorca en el mes de noviembre del año 2001. La calle que ha cambiado de nombre es precisamente la misma en la que vivía la víctima. Al acto acudieron, además del alcalde y de las primeras autoridades municipales, la mayoría de compañeros de la víctima. Los componentes de la brigada municipal han buscado una piedra, que fue colocada en la plaça Nova de Calvià, en la que insertaron una placa en memoria del compañero fallecido, que precisamente hoy se cumplen dos años de este accidente mortal. Se da la circunstancia que la madre de Vicente Chinchilla es la actual concejal de cultura del Ayuntamiento de Calvià, que vivió con mucha emoción el acto celebrado ayer, y que estuvo acompañada por la esposa de su hijo, así como con otros familiares. El alcalde Carlos Delgado señaló que recordaba con gran pena el día que se enteró de la muerte del trabajador, que fue aplastado por un árbol, porque precisamente se encontraba en un restaurante comiendo con la madre de Vicente.
Por su parte, un representante de la brigada municipal en la que estaba trabajando Vicente Chinchilla recordó el gran cariño que sentían por él todos sus compañeros, y destacó su buen humor y su simpatía. Este compañero explicó que se ha buscado una piedra especial que sirva como recuerdo al trabajador fallecido, y que fue encontrada en la cantera de Ses Vinyes, en Calvià.
La dedicatoria de esta calle al miembro de las brigadas municipales se acordó en el pleno celebrado el pasado día 31 de octubre. La calle se llamaba antes es Collet.