Ian Huntley, el acusado de los crímenes de Soham, «quiso» matar a las niñas de diez años Holly Wells y Jessica Chapman, según dijo ayer la fiscalía en la primera jornada del juicio por el asesinato de las menores, en agosto de 2002.
El fiscal Richard Latham explicó al tribunal y al jurado, formado por siete hombres y cinco mujeres, que Huntley, de 29 años y antiguo conserje en la escuela de las niñas, las mató «por razones que sólo él conoce» y luego ocultó los cuerpos.
Ian Huntley es el único acusado del asesinato de Jessica y Holly, que desaparecieron el domingo 4 de agosto de 2002 en Soham (sureste de Inglaterra) y aparecieron muertas trece días después en un bosque cercano. El juicio por estos crímenes suscita una gran expectación en este país, que se volcó durante la búsqueda de las niñas para, finalmente, enfrentarse a un trágico desenlace.
El único acusado, Ian Huntley, se ha declarado inocente del doble asesinato, aunque acepta haber conspirado para obstruir el curso de la justicia. Su novia de entonces, Maxine Carr, de 26 años y ex maestra en la escuela de las chicas, está acusada de conspiración para obstruir la justicia y de dos cargos de asistencia a un criminal, imputaciones que niega. El fiscal expuso los acontecimientos que, según sus pruebas, tuvieron lugar el 4 de agosto. Dijo que las escolares «cayeron en las manos» de Huntley cuando volvían de casa de Holly en Soham, condado de Cambridgeshire, y el acusado «decidió, por alguna razón», matarlas.