La Unidad Territorial de Costas (UTC) de la Policía Local de Porto Cristo intervino en los dos casos de violencia doméstica que se produjeron entre el viernes y el lunes.
El primero de los episodios tuvo lugar a las 23.30 horas, cuando los agentes recibieron una llamada telefónica de un vecino que contaba que un individuo estaba destrozando la puerta de una vivienda, al parecer por desavenencias con su esposa. Cuando una patrulla llegó hasta la dirección señalada se encontró con que, en efecto, la puerta de acceso estaba violentada y en el interior había un gran revuelo de muebles, muchos de ellos por el suelo. La inquilina denunció que su marido, al que le había impedido la entrada, la había emprendido a golpes con ella. J.M.P., de 35 años y que al parecer cuenta con antecedentes policiales, fue detenido por este motivo y trasladado a los calabozos, mientras la víctima recibía asistencia.
Tres noches después, el lunes, fue arrestado M.M., un marroquí de 29 años que supuestamente apaleó a su mujer. Un juzgado de Huesca había emitido una orden de alejamiento para que el magrebí no se acercara a la joven, pero el individuo se las arregló para encontrarla y tras discutir con ella le golpeó en hombros y espalda.