Un restaurante chino de la calle Joan Miró, en Palma, era utilizado como «tapadera» por una organización asiática para explotar como prostitutas a mujeres de la misma nacionalidad. La Policía, en una investigación realizada por la UCRIF, ha desarticulado a este grupo y ha localizado a ocho jóvenes chinas que trabajaban como prostitutas en el piso superior de este restaurante. Cuatro han sido las personas detenidas en esta operación. Se trata de Jianbing Li, de 31 años, Xuehu Z., de 27, Heg R, de 43 y Xinjun L., de 41. Al primero se le considera el responsable del grupo, a Xuehu Z., su más estrecho colaborador.
Ésta es la tercera organización de delincuentes chinos desarticulada este año en Mallorca. Sin embargo, según explicó el responsable de esta unidad policial, éste ha sido el primer grupo que, no sólo en Mallorca sino en todo el territorio nacional, se ha comprobado que se dedicaba al negocio de la prostitución, ya que las dos anteriores organizaciones lo que hacían era explotar a sus compatriotas en restaurantes asiáticos o como mano de obra barata.
Como es habitual en este tipo de organizaciones delictivas, las mujeres que captan suelen formar parte de familias con pocos recursos económicos. Se cree que les prometían entrar en Europa para trabajar como obreras, pero una vez que habían llegado a su destino las obligaban a prostituirse. La organización entregaba a las mujeres la documentación necesaria para salir de China y entrar en Europa, sobre todo a través de los países del norte.