Un joven alemán de 27 años, Deni Wengerte, que trabajaba de cocinero en un restaurante de Cala Figuera, en Santanyí, cayó al mar en la madrugada de ayer y murió ahogado, debido al fuerte temporal que en las últimas horas está azotando esta zona de la costa mallorquina. Además de esta muerte, los equipos de seguridad buscaban ayer por la mañana a otro joven, que trabajaba de camarero con el fallecido, y del que se piensa que le acompañaba en el momento del accidente y que también fue arrastrado por el mar. Sin embargo, el temporal impidió ayer a los equipos de rescate iniciar la búsqueda en el mar de esta persona, que también es alemán, se llama Suen Simmeran y tiene 21 años.
Deni Wengerte, al salir del trabajo sobre la una de la mañana, quiso ver de cerca el temporal y se cree que convenció a su amigo para que le acompañase, a pesar de la advertencia de su jefe de que fueran con cuidado. Se dirigió hacia la zona conocida como ses Penyes. Sin embargo, por circunstancias que se desconocen el joven se vio sorprendido por una gran ola, que le arrastró hacia el mar. El temporal impidió que pudiera salir a flote y, pese a que intentó agarrarse a las rocas, murió ahogado. A primera hora de la mañana de ayer un vecino de Cala Figuera descubrió el cadáver del cocinero alemán que estaba flotando cerca del muelle.
El testigo avisó a la Policía Local de Santanyí que, al tratarse de un ahogado, se comunicó lo ocurrido a la Guardia Civil, que se desplazó al lugar de los hechos junto a la juez del Juzgado de Instrucción número 3 de Manacor y el médico forense. Una vez rescatado el cadáver los agentes de la Guardia Civil iniciaron una investigación para determinar lo ocurrido. El cadáver no portaba encima ninguna documentación, pero se averiguó que se trataba de un joven germano que desde hacia algunos años trabajaba en el hostal «Mar i cel», en Cala Figuera. Sus compañeros le identificaron. Estas personas señalaron también que sospechaban que la víctima no se encontraba sola cuando se produjo el accidente, sino que iba acompañado de un camarero, del que ayer no se tenían noticias de su paradero. Los propietarios del hostal se mostraron ayer muy afectados por la tragedia.