La Policía Judicial de la Guardia Civil de Manacor ha detenido a un ciudadano alemán de 57 años acusado de disparar por tres veces una pistola durante un forcejeo que mantuvo con su ex esposa en una casa de Cala Figuera, en Santanyí. La mujer, además, fue golpeada en el rostro y sufrió lesiones en un ojo. Los hechos ocurrieron en la noche del lunes, cuando W.W. se presentó en la casa de su ex mujer, con la excusa de invitarla a cenar. La relación entre ellos está, al parecer, muy deteriorada y la señora se negó a este extremo. Entre ambos se inició una discusión que fue subiendo de tono y que adquirió, de súbito, tonos violentos y dramáticos. El hombre, supuestamente, esgrimió una pistola, pero la señora, en lugar de amedrentarse, se enfrentó con él. Durante el forcejeo el arma se disparó por tres veces, pero ninguno de los dos resultó herido.
La mujer, a continuación, fue agredida físicamente y uno de los golpes le alcanzó en el rostro, más en concreto en el ojo, que se le hinchó de forma preocupante. La víctima dio aviso de lo ocurrido y en pocos minutos una patrulla de la Benemérita llegó al chalet. W.W. ya se había marchado a su casa, que se encuentra en las inmediaciones, y al saberse que tenía un arma de fuego en su poder entró en acción la Policía Judicial, que adoptó todas las medidas de seguridad necesarias en estos casos. El acusado, sin embargo, se había deshecho de la pistola, que fue localizada en una batida posterior no muy lejos de su casa. El ciudadano alemán no ofreció resistencia y fue trasladado hasta las dependencias beneméritas, donde le tomaron declaración sobre lo acontecido. El resultado del interrogatorio no ha trascendido, pero se sabe que la principal hipótesis policial sobre lo ocurrido es que W.W. sufrió un ataque de celos y reaccionó violentamente cuando su ex esposa declinó su oferta de cenar juntos.
El acusado ha sido trasladado a las dependencias de la Policía Local de Manacor, algo habitual ya que la Benemérita no dispone de celdas en condiciones, y en las próximas horas será presentado ante la autoridad judicial. La víctima, por su parte, fue evacuada hasta un centro médico próximo la misma noche de la agresión, y tras recibir las primeras curas se confirmó que su estado no era grave.