EFE-EEUU
El fiscal general de EEUU, John Ashcroft, postergó ayer por 30 días
la ejecución de Timothy McVeigh, condenado por el ataque terrorista
de Oklahoma City, para que sus abogados estudien datos hasta ahora
ocultos. Ashcroft dijo que, por lo tanto, «la ejecución de McVeigh
será el 11 de junio». La ejecución de McVeigh estaba fijada para el
miércoles 16, en cumplimiento de su condena por el ataque con
explosivos de abril de 1995 en Oklahoma en el cual murieron 168
personas y varios centenares resultaron heridas.
El anuncio se hizo público después de que este jueves la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) entregara a los abogados de McVeigh más de 3.100 páginas de documentos que no se habían mostrado durante el juicio de 1997. «El FBI no cumplió con el requisito de entregar todas las evidencias», dijo Ashcroft en conferencia de prensa. «He ordenado una investigación completa de las razones por las cuales el FBI hizo esta entrega tardía de las evidencias». «Mi deber es la protección de la integridad del sistema y el proceso de la justicia», dijo Ashcfroft. «El proceso de la justicia requiere una equidad básica y la evaluación de todos los hechos, esto es esencial para la protección de los derechos de los ciudadanos».
Ashcroft dijo que «los abogados del Departamento de Justicia están seguros de que los documentos, ahora entregados a los abogados de McVeigh, no crean una duda razonable sobre su culpabilidad». «Pero estos documentos debieron entregarse a sus abogados a su debido tiempo», añadió. Por su parte, el presidente George W. Bush dijo ayer viernes que el aplazamiento de la ejecución de Timothy McVeigh fue una «decisión correcta»: «El Fiscal General (Secretario de Justicia) ha tomado una decisión correcta» declaró Bush, durante una conferencia de prensa en la Casa Blanca.
Uno de los abogados de Timothy McVeigh ya anunció que seguiría las directivas de su cliente para eventualmente pedir una postergación de la ejecución. «Estoy estupefacto», declaró el viernes a la ABC uno de los abogados de McVeigh, Nathan Chambers. «Vamos a escuchar a nuestro cliente y pienso que seguiremos las directivas de nuestro cliente» sobre cómo actuar frente a estas revelaciones, añadió.
Un condenado a muerte en EE UU firma la petición para la
nacionalidad española
Pablo Manuel Ibar, condenado a muerte, firmó ayer en la prisión
estatal de Starke, en el norte de Florida, los documentos para
obtener la nacionalidad española, a la que tiene derecho por ser su
padre español. El sobrino del ex boxeador José Manuel Ibar
«Urtain», ya fallecido, firmó ante el cónsul español en Miami,
Javier Vallaure, una petición especial a las autoridades españolas
para que se le conceda la nacionalidad. Ibar, de 29 años y nacido
en Estados Unidos, considera que al tener la nacionalidad española
aumentarían sus posibilidades en la apelación contra la sentencia
de muerte por el asesinato de tres personas en 1994.