El Tribunal Supremo ha rebajado la condena que le impuso la Audiencia de Castellón a un hombre que intentó acabar con la vida de su mujer, de la que se había separado recientemente, de 5 años a sólo 6 fines de semana, al apreciar que el acusado pudo haber matado a su esposa y «no quiso hacerlo». De este modo, el delito de homicidio en grado de tentativa que le imputaba la sentencia recurrida ha quedado finalmente para el Alto Tribunal en una falta de lesiones. Higinio L.S., de 38 años de edad, y su esposa, Isabel G.S., decidieron separarse en septiembre de 1997.
Tras dos meses de un constante acoso por parte del hombre, el 8 de noviembre del mismo año, armado con un cuchillo de «grandes dimensiones», de 16 centímetros de hoja, acudió al domicilio de un hombre de 71 años que frecuentaba el bar de pensionistas que regentaba su esposa. Allí encontró a Isabel, a quien le colocó el cuchillo en el estómago diciéndole que la iba a matar. Le dio varios puñetazos en la cara y la tiró al suelo, donde siguió golpeándola repetidas veces dándole múltiples patadas y causándole diversas lesiones como hematomas en el labio, en un ojo y la cabeza, así como la pérdida de un diente. Ese a estas lesiones, el Supremo sólo le condena por una falta.