«Es insuficiente, o mejor: es de risa. No es justo que a un pobre drogadicto que roba 3.000 pesetas en un supermercado lo condenen a cinco años de cárcel y que la muerte de mi hijo sólo le cueste a ese hombre un año». Francisca Vega, la madre del niño degollado por un dogo argentino de Can Picafort, hace casi un año, declaró ayer a Ultima Hora que no tiene previsto recurrir la sentencia, pero advirtió que apelará «si el dueño del perro no ingresa en prisión».
La madre de Francisco Miguel Hiralgo Vega definió la sentencia conocida el viernes como «una auténtica atrocidad» y dijo no entender «cómo se puede condenar con un año de cárcel a una persona que tenía una fiera como ésa, capaz de degollar a un niño». Para la mujer, está claro que si Alfredo Cordero, el propietario de 'Copi', «hubiera tomado medidas, esta desgracia tan grande nunca habría ocurrido. Por eso ahora no nos pueden decir que con un año de cárcel todo se arregla; no es justo».
Francisca aseguró que lo que más desea en la actualidad «es olvidar esta pesadilla», pero añadió que no está dispuesta a permitir que Cordero eluda la cárcel: «Cualquier delincuente por un delito mucho menor pasa varios años entre rejas. Ese hombre tendría que ser condenado a cadena perpetua». Tal y como informamos ayer, el magistrado Carlos Izquierdo Téllez, titular del Juzgado de lo Penal número 4 de Palma, dictó sentencia condenatoria de un año para Cordero, por un delito de homicidio imprudente.