El fiscal Adrián Salazar y el abogado Jaime Bueno, como acusación particular, solicitaron ayer una condena de tres años de prisión para un destacado militante de un grupo ultra de tendencia fascista, que fue acusado de golpear a un joven seguidor de movimientos pacifistas. El acusado Francisco A.M., que es presidente del grupo «Ultras Mallorca», negó su participación en unos hechos que ocurrieron en la madrugada del 16 de julio de 1998 en las inmediaciones de la plaza Gomila.
El agredido, de 30 años de edad, explicó que aquella noche estuvo en un bar con unas amigas. Cuando el grupo, formado por un joven y tres chicas, se dirigía hacia el coche, se dieron cuenta de la presencia de un turismo de color oscuro, que subía a toda velocidad la cuesta que enlaza el Passeig Marítim con la calle Joan Miró. Al pasar junto a ellos el coche redujo su marcha. La persona que ocupaba el asiento delantero sacó la mitad del cuerpo por la ventanilla y golpeó al joven pacifista con un bate de beisbol. Una vez logrado su objetivo el coche aceleró y el agresor se dio a la fuga. Sin embargo, fue identificado por la víctima y por sus acompañantes.
El juicio se celebró ayer en el juzgado de lo penal número 1 de Palma. La policía tuvo que montar un servicio de seguridad para evitar un enfrentamiento entre el acusado y las más de 50 personas que se habían citado en el juzgado para protestar contra él.