La Audiencia de Palma ha condenado al dueño de un perro de la raza rottweiler a indemnizar a un hombre que fue atacado por el animal, y que ello le supuso perder un dedo de la mano. El tribunal de la Sección Cuarta de la Audiencia ha fijado una indemnización de 7.395.924 pesetas, que recibirá la víctima por las lesiones y secuelas que sufrió en este ataque. Como consecuencia de este ataque a la víctima tuvieron que amputarle el dedo pulgar de la mano derecha.
Los hechos ocurrieron en una finca de Mallorca en el mes de agosto de 1996. La víctima, que era aficionada a la cría de perros Rottweiler, acudió a una finca de Mallorca, donde había varios ejemplares de esta raza. Según parece, no era la primera vez que entraba en esta propedad. Dentro de la finca había un perro al que sus dueños le pusieron el nombre de «Rambo». El perro era muy agresivo, según reconoció su dueño en este pleito, y por este motivo estaba encerrado dentro de una jaula. El animal, sin que se sepan las causa exactas, salió de su jaula y atacó al visitante. El perro mordió la mano derecha de la víctima, pero también lo hizo en el antebrazo izquierdo y en el abdomen. La víctima tuvo que ser trasladada a un hospital tras sufrir el ataque del animal. Su presencia hospitalaria se prolongó durante 24 días. Durante este periodo los médicos tuvieron que amputarle el dedo pulgar de la mano derecha, amén del tratamiento que le aplicaron a las otras heridas. Después de salir del hospital el herido permaneció 312 días de baja, periodo por el que logicamente ha sido indemnizado. Esta indemnización ha sido aumentada por el tribunal de la Audiencia de Palma que estudió el recurso de apelación. El juez de primera instancia que juzgó la demanda sólo otorgó una indemnización de 5.359.931 pesetas.