La Guardia Civil ha decidido intensificar la vigilancia en zonas
residenciales de Andratx tras la oleada de robos de las últimas
semanas.
Desde ese período, tal y como ha ido informando este periódico, se
han registrado numerosos asaltos a chalets desocupados. Los
investigadores creen que podría tratarse de una organización que
vigila casas de lujo de Cala Llamp, Momport, Cala Blanca y Camp de
Mar y roba en su interior cuando los dueños están ausentes.
Los últimos «palos» fueron sonados y los ladrones se hicieron con un botín total de diez millones de pesetas en joyas, además de otros efectos y dinero en efectivo.
Ahora la 313 Comandancia ha reforzado la vigilancia en la zona, con patrullas del Núcleo de Reserva. Los agentes se apuestan en lugares específicos para controlar el tráfico y el paso de sospechosos. El efecto disuasorio ha sido claro y en los últimos días, al contrario de la tendencia ya reseñada, ha descendido de forma contundente la inseguridad en Andratx y sus zonas residenciales.