Enfocar, focalizar, etcétera

| Palma |

Enfocar es la clave. ¿De qué? De todo. O enfocas o no enfocas, o focalizas lo que hay que focalizar o no ves nada. Todo es escenográfico, de ahí la gran importancia de los focos. No hay hechos, hay focos. Si tienes foco (estás en el foco) no hacen falta ideas, ni proyectos, ni talento. Incluso son un lastre, porque ahuyentan a los focos. Se pueden construir docenas de frases hechas, o por hacer, que expliquen cualquier fenómeno o acontecimiento con sólo cambiarles el verbo que acompaña al foco. Poner el foco es quizá la expresión más repetida, pero también ampliar el foco, abrir el foco, desviar el foco, estar en el foco, buscar el foco, etc.

La actualidad, que es la parte visible de la realidad, es cuestión de focos, y por las películas sabemos que cuando el foco ilumina a alguien, de inmediato se le ovaciona o se le acribilla a balazos. Es la ley del foco. Por si acaso, si de pronto se encuentran dentro de un círculo de luz, salgan corriendo como un prisionero intentando escapar de la cárcel. Ocúltese y aguarde a que el foco letal pase de largo. ¿Y quién maneja los focos? Porque está claro que el que maneja los focos lo maneja todo, es el puto amo. Me disculparán que no toque este aspecto de la cuestión, eso sería poner el foco en los focos, y a los que determinan qué se enfoca no les gusta nada que les enfoquen cuando están focalizando algo.

Salvo que sean de los que siempre se desplazan rodeados por sus propios focos, no dan un paso sin ellos, que los mantienen en estado de permanente luminosidad como si fueran estampas de santos. Se focalizan en sí mismos, sólo se enfocan a sí mismos, como el presidente de EEUU. Es decir, que han ganado, puesto que los focos, según se mire, son la medida del éxito. Y según se mire no, hemos visto que también son lo contrario, pero eso pasa con todas las cosas importantes.

Y nada es más importante que los focos. Por eso hay tantas frases de focos. Las palabras no significan lo mismo bajo los focos que sin focos, ni siquiera suenan igual. No diría yo lo que sea que esté diciendo si ahora me estuviesen enfocando como a una polilla. Quizá estaría cuerpo a tierra detrás de un montículo, eludiendo el foco.

Sin comentarios

No hay ningún comentario por el momento.

Lo más visto