El notición de los últimos días, con portadas de prensa y telediarios, con abundante información gráfica sobre fotos de familia, intercambios de carteras y copiosos lloriqueos en algún caso, es que tenemos Gobierno, y muy decidido a gobernarnos. No es que alguien recuerde ningún momento en el que no hayamos estado sobradamente gobernados, pero aun así la configuración de un nuevo Gobierno siempre es noticia, y su primer Consejo de Ministros se anuncia con gran alborozo, como si nos hubiese tocado la lotería. La verdad es que a todos los Gobiernos les encanta hacerse notar y llamar la atención, a veces casi parece que esa es su labor fundamental, y se supone que ver a los gobernantes tan felices, estrenando o repitiendo cargos, por fuerza debe hacernos felices a todos y llenarnos de alborozo. Vale, pues albricias, ya tenemos Gobierno.
Ignoro si deberíamos hacernos los sorprendidos como en las fiestas sorpresa de cumpleaños, pero la verdad es que tampoco entiendo ese anuncio (lo dijo el señor presidente, y lo han repetido todos los medios) de que esta vez se trata de un Gobierno «de alto perfil político». ¿Qué quiere decir eso? Todos los Gobiernos son políticos, ya de frente o de perfil, y en tanto que se trata del Ejecutivo, políticos del máximo nivel. ¿Significa eso del alto perfil político que sus integrantes son, por así decir, más políticos todavía? En fin, esa manía de hacerse notar, como si fuera posible no enterarse de que nos están gobernando, propala a veces expresiones muy enigmáticas. «Un alto perfil político para una legislatura de marcado perfil político», explicó el presidente. ¿Y qué significa una legislatura de marcado perfil político? Para los analistas, parece que significa una legislatura altamente tormentosa, incierta, escabrosa incluso, es decir, exageradamente política según el concepto de política que tienen los propios políticos. De ahí que exija perfiles políticos altos para manejarla. Ponen el ejemplo de Oscar Puente, un humorista que ha llegado a ministro de Transportes por su hilarante actuación en la torpe investidura de Feijóo. Pero para perfiles políticos altos, los que se fueron pataleando. Albricias, tenemos nuevo Gobierno.