En febrero de 2021 José Manuel Pérez Tornero, periodista y catedrático de la Universitat Autònoma de Barcelona, fue nombrado presidente de la Corporación de Radio y Televisión Española tras el acuerdo del PP, PSOE, Podemos para renovar el Consejo de Administración de RTVE. Este lunes anunció su dimisión al manifestar que «antes de tener que de dejar de lado mis convicciones y mi responsabilidad institucional con el compromiso adquirido, tengo la intención de presentar mi renuncia a la presidencia de RTVE, y a formar parte de su consejo». Pérez Tornero lamentó la «falta de clima propicio para el diálogo» y explicó que su proyecto para dirigir la radio y televisión públicas de España «no era un simple lavado de cara». Sus objetivos, claros y acertados, consistían en «gestionar con un consenso amplio, sin partidismos; con profesionalidad e independencia; afianzar el pluralismo interno y dejar atrás la fragmentación corporativa». Lo importante era «lograr que RTVE acompañara la transformación del país, la profundización de la democracia, el avance de la ciencia, de la cultura y del bienestar social». Todo ello no ha sido posible.
El sosiego y el diálogo imposibles.
Estos objetivos no se han cumplido. A la desafección del PSOE y Podemos –que le acusó de «haberse puesto a las órdenes del PP»– se añade la crítica del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al hacer pública La Moncloa su falta de confianza con Pérez Tornero. RTVE no ha contribuido a crear una esfera pública sosegada, dialogante y sin polarización, como intentó y no pudo, lamenta el profesor y periodista.
Pérdida de un profesional digno e íntegro.
En un escenario de precampaña electoral, y demasiada tensión en la escena política española, Pérez Tornero opta por marchar. «Vine a sumar y a construir, y me voy con la conciencia tranquila», subraya. Entramos en un nuevo periodo de interinidad con la pérdida dolorosa de un profesional digno e íntegro engullido por las presiones y los intereses de partido en RTVE.