El robot con aspecto de cobaya Moflin, que incorpora funciones impulsadas por Inteligencia Artificial (IA) para desarrollar emociones, interactuar y aprender de los usuarios, estará disponible a partir del próximo 7 de noviembre y será Casio la encargada de comercializarlo.
Moflin es un peluche presentado en la feria tecnológica CES 2021, diseñado por la empresa de 'hardware' Vanguard Industries, que lanzó una campaña de financiación colectiva en Kickstarter para llevar adelante su proyecto. Aquel año, además, el dispositivo ganó el Premio a la Mejor innovación.
En la presentación de este robot-mascota impulsado por IA, la tecnológica indicó que integraba capacidades emocionales y que era capaz de aprender e interactuar con los usuarios a través de distintos sonidos y movimientos.
Ahora, en colaboración con Vanguard Industries, Casio ha anunciado el lanzamiento de este producto, que ya se puede reservar para su compra por anticipado en su web. Su precio es de 59.400 yenes (unos 363 euros al cambio actual) y estará disponible a partir del 7 de noviembre en los colores gris (plata) y amarillo (oro). Por el momento, se desconoce si se venderá fuera de Japón.
La tecnológica japonesa ha publicado que los usuarios pueden encontrar en el muñeco Moflin una forma de relajarse «juntos», salir y llevarlo «dondequiera que vayan», ya que es inalámbrico, además de que les puede servir para mejorar sus habilidades comunicativas.
En este sentido, ha dicho que el robot «tiene emociones independientes impulsadas por IA» y que, mediante la conversación, es capaz de «cambiar sus emociones, como el enfado, la tristeza y la felicidad de diferentes maneras». «Reacciona como una criatura real», ha añadido, porque tiene personalidad y un repetorio de gestos y voces.
De esta manera, si se le abraza, se le habla o se le acaricia, sentirá emociones positivas, mientras que si no se le presta atención o se le asusta, experimentará emociones negativas. Asimismo, creará un vínculo especial con su propietario según vayan pasando los días, ya que tiene la capacidad de recordar la voz de su dueño.
Moflin viene con una caja en forma de cama o nido que sirve como base de carga, tiene una autonomía de cinco horas y se puede conectar con una aplicación dedicada, que permite a los usuarios hacerse «una mejor idea de los sentimientos» del peluche y recordar las interacciones que ha registrado a lo largo de su vida. Además, tiene servicio de reparación -por ejemplo, para reemplazar la batería o el sistema- y de limpieza, para mantener su pelaje esponjoso.