Un vídeo manipulado con inteligencia artificial del fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, apareció en Instagram, una de sus plataformas, que dijo que no tiene intención de censurarlo, según informaron este martes medios estadounidenses.
«Imagina esto por un segundo: un hombre, con un control total de datos robados de miles de millones de personas, todos sus secretos, sus vidas, sus futuros», afirma de forma manipulada Zuckerberg, en una aparente descripción de su persona.
El vídeo fue creado por la empresa emergente israelí Canny AI, y por los artistas Bill Posters y Daniel Howe supuestamente para un proyecto artístico llamado Spectrum que se exhibió en el festival de cine documental británico Sheffield Doc/Fest.
Junto al de Zuckerberg, también presentaron vídeos de este tipo del presidente de EE.UU., Donald Trump, del actor estadounidense Morgan Freeman, de la celebridad Kim Kardashian o de la artista serbia Marina Abramovic.
A estos vídeos manipulados se los conoce como deepfake por las técnicas de inteligencia artificial que se utilizan para desarrollarlos con resultado extremadamente realista.
El mes pasado, Facebook no quiso eliminar de su plataforma uno de estos vídeos ultrafalsos de la presidenta de la Cámara Baja de EEUU, Nancy Pelosi, aunque aseguró que le bajaría la calificación para que apareciese a menos usuarios.
Pelosi, en ese momento, dijo a una emisora californiana que el hecho de «no eliminar algo que saben que es falso demuestra que (Facebook) estaba dispuesto a facilitar la injerencia rusa» en las elecciones a la Casa Blanca que ganó Trump en 2016.
Ante la disyuntiva de qué hacer con el vídeo ultrafalso de Zuckerberg, un portavoz de Instagram aseguró a medios estadounidenses que tampoco tenían intención de eliminarlo.
«Trataremos este contenido de la misma manera que tratamos toda la desinformación en Instagram. Si terceros lo marcan como falso, lo filtraremos de las plataformas de recomendación de Instagram como Explore o las páginas de etiquetas», dijo.
Facebook ha vivido los últimos años inmersa en escándalos de privacidad y de propagación de información falsa.
Uno de ellos, el de Cambridge Analytica, forzó el año pasado a Zuckerberg a comparecer ante el Congreso de Estados Unidos y la Eurocámara.
La empresa Cambridge Analytica utilizó datos de Facebook para elaborar perfiles psicológicos de votantes que supuestamente vendieron, entre otros, a la campaña de Trump durante las elecciones de 2016.