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¿Cuáles son los síntomas más habituales por intoxicación al consumir setas?

Vómitos, diarrea, malestar general, fiebre o fallos hepáticos son las consecuencias directas, por lo que se recomienda no consumirlas ante la menor duda sobre su toxicidad

Ejemplares de Picornell o cama-seca (Cantharellus alborufescens). | Joan Carles Salom

| Palma |

Otoño es la temporada alta, el momento punta del año en lo que a la recogida y consumo de setas se refiere. Pero también, se disparan los casos de intoxicación por la ingesta de hongos o mixomicetos, que con la llegada de las lluvias y la bajada de temperaturas encuentran su espacio ideal para crecer en zonas boscosas, de forma especial en encinares o pinares y en áreas, en el caso de Mallorca, muy señaladas como la Serra de Tramuntana.

Los expertos, como es el reputado micólogo y biólogo Joan Carles Salom, coautor del Catálogo de Hongos y Mixomicetos de las Islas Baleares, recomiendan, ante la menor duda, no recolectar la seta en cuestión. «Hay muchas especies parecidas y que pueden dar lugar a confusión», asegura, dentro de las 2.359 catalogadas en el archipiélago, de las que cerca de una veintena pueden ser catalogadas como mortíferas. «No hay reglas para diferenciarlas», puntualiza, por lo que reclama a los aficionados que no tengan larga experiencia que sean prudentes.

Cabe destacar que los síntomas de intoxicación por ingesta de setas podrían confundirse con alergias o intolerancias a proteínas que aportan las mismas, aunque las primeras muestras de los efectos adversos para la salud suelen aparecer entre las 6 y las 12 primeras horas tras su consumo, pudiéndose extender hasta las 24 horas posteriores. Además, la cantidad consumida es un factor importante a la hora de calibrar la fuerza de la posible intoxicación.

Vómitos, diarrea, malestar general o fiebre son los primeros síntomas en emerger, pudiendo ir acompañados con el paso del tiempo de baja tensión o las primeras muestras de los temidos daños hepáticos, que podrían manifestarse en forma de ictericia, momento en el que la piel o los ojos adquieren tintes amarillentos y la infección es seria.

Ante un posible fallo hepático de fatales consecuencias, conviene actuar de inmediato y acudir a un centro de salud u hospitalario. La rapidez puede ser decisiva en caso de que la intoxicación sea severa, habiendo llegado en ocasiones a provocar la muerte del consumidor.

Ante cualquier duda o consulta, también está disponible el teléfono del Instituto Nacional de Toxicología (915620420), aunque también se puede contactar con el servicio de Emergencias a través del 112 o acudir de inmediato al centro de salud más próximo para evaluar el grado de la intoxicación y actuar de inmediato y en consecuencia.

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