El Manantial, la casa en la Costa de los Pinos que se ha puesto a la venta por 35 millones de euros, ha sido lugar de veraneo para la familia Obregón durante más de cuatro décadas. Una espectacular vivienda, de más de 1.000 metros cuadrados, que construyó Antonio García Fernández, padre de la actriz, presentadora y bióloga Ana Obregón. Tras morir el patriarca, un empresario y constructor de éxito, el 16 de septiembre de 2022, la propiedad fue heredada por sus hijos, quienes ahora la ponen a la venta, según se dice, por su elevado coste de mantenimiento. Este verano, los hermanos se han repartido en semanas la casa para uso y disfrute. Ana, la más mediática de los hermanos, ha pasado los últimos quince días de agosto acompañada de su nieta Ana Sandra, y regresando al tradicional posado, previa exclusiva para la revista ¡Hola!.
En la década de los 80 y 90 la urbanización de Costa de los Pinos fue lugar de veraneo para muchos madrileños adinerados, quienes celebraban glamourosas fiestas de verano. Empresarios, ricos y famosos se daban cita en los jardines y terrazas frente al mar, quienes fueron adquiriendo algunas de las lujosas propiedades de primera línea. Actualmente, muchas de aquellas propiedades se han vendido a extranjeros y los pocos que quedan comienzan a plantearse venderlas. Según algunos experto mobiliarios, el precio de 35 millones podría ser elevado, aunque para la familia Obregón el mayor valor es el sentimental ya que allí se ha reunido toda la familia y son muchos los recuerdos.
El nombre de El Manantial para la vivienda es debido a que el terreno donde se construyó el chalet es el único de la urbanización que tiene pozo de agua propio y de excelente calidad. La vivienda fue construida con los mejores materiales de aquellos tiempos, con una línea mediterránea y aprovechando toda la luz natural posible. Además cuenta con una gran vegetación, especialmente granados y pinos. La piscina ha sido escenario de los numerosos posados de la polifacética Ana Obregón, quien a pesar de conocerse como casa de Ana Obregón, no es la única propietaria de El Manantial. La vivienda consta de dos accesos al mar, uno a la pequeña playa de El Rajolí, y otro a un pequeño embarcadero 'privado'.