Tener mesa en Ca's Patró March un domingo de julio es un privilegio. Como lo es poder degustar las especialidades del conocido restaurante ubicado en Cala Deià, que este 7 de julio ha vivido una situación tan inusual como curiosa, además de unas horas de tranquilidad que contrastan con la imagen habitual y el ajetreo en su terraza y su cocina en un día tan señalado y en unas fechas punta dentro de su agenda.
Muchos rostros famosos han pasado por sus mesas durante años, pero quienes tenían una de las reservas más singulares de su historia finalmente no las ocuparon. Porque un cliente desconocido realizó una petición exclusiva que fue atendida, con sumo esfuerzo, por los gestores del conocido restaurante, que tuvieron que desviar y reubicar reservas a lo largo de los próximos días, cambiando los planes de clientes y habituales.
Y es que se realizó una reserva para dos personas. Hasta aquí todo normal en el contexto de las fechas en que nos encontramos. Lo singular era la petición de exclusividad, solicitando toda la terraza para los clientes, cuya presencia generó enorme expectación, además de interrogantes entre los responsables y empleados de Ca's Patró March, a quienes les picaba la curiosidad por poner cara y ojos a los protagonistas de esta historia.
Más, cuando se solicitaron preparativos especiales, como decoración floral, música y género fresco y de calidad como langostas y bogavantes, que desfilaron desde el mar hasta Ca's Patró March. La hora fijada para la reserva eran las cuatro de la tarde. Pero, finalmente, todo quedó en nada. Los misteriosos clientes no se presentaron, pero ya habían abonado por adelantado el importe de la reserva, cubriéndose las espaldas el restaurante. Aunque a muchos les quedará para siempre el interrogante sobre quiénes eran los exclusivos comensales.