La comunidad de calistenia de Baleares está de enhorabuena. El pasado sábado, el municipio de Calvià acogió la mayor competición calisténica de los últimos años en nuestra comunidad. La Santa Ponça Battles llegó a su cuarta edición y lo hizo con un elenco de participantes de primer nivel de ámbito local, autonómico, nacional e internacional, entre los que se encontraban el bicampeón mundial, Daniel Hristo; los campeones nacionales y europeos, Edu Villar, Vera Khezina, Joel Trülls y Manuel Ramos, entre otros deportistas de reconocido prestigio y nivel, representando a las diferentes comunidades autónomas y países, como Reino Unido, Francia, Colombia, Brasil, Alemania y Estados Unidos.
El evento contó con la colaboración del Ajuntament de Calvià, representado por el regidor d'Esports, Javier Tascón. El máximo responsable del área explicó la apuesta firme y decidida del equipo de gobierno calvianer por fomentar el binomio deporte y turismo en el municipio. Además, adelantó que durante esta legislatura está prevista la construcción de cuatro nuevos parques de calistenia en diferentes puntos de Calvià. Esta noticia fue muy bien acogida por la comunidad –integrada en su mayoría por jóvenes menores de 30 años– que entienden esta modalidad deportiva como una forma de vida sana.
La competición fue retransmitida en directo a través del canal de Twitch Directo_TV, y fueron varios miles de personas las que siguieron el evento por streaming. Un total de 32 atletas, cuatro de ellos de Mallorca, participaron en la competición. Tras superar varias fases clasificatorias, la victoria, y por tanto vencedor de la Santa Ponça Battles 2023, fue para el madrileño Miamber, un calisténico perteneciente al club Aguilillas, que representaba a la comunidad de Madrid. A la finalización, muy emocionado, y visiblemente afectado, dedicó el premio a su madre que había fallecido recientemente a consecuencia de un cáncer. «En la actualidad podemos decir que la calistenia se ha convertido en la actividad deportiva de mayor crecimiento en los últimos años en la Isla. De hecho, son muchos los jóvenes que se acercan a los parques atraídos por este deporte urbano. En cada parque se crea una comunidad, y junto a los centros privados, la cifra de practicantes supera el medio millar», afirmó Diego Ponce, uno de los referentes de la calistenia balear.
«Nos estamos convirtiendo en la alternativa más popular para todas aquellas personas que quieren practicar un deporte completo y saludable. Queremos aprovechar para agradecer al Ajuntament de Calvià y a su regidor d'Esports la colaboración que nos están brindando en la organización de estos eventos. No es fácil coordinar los traslados y participación de más de 50 atletas llegados desde todos los puntos del mundo. Ya estamos trabajando con ellos para iniciar de forma conjunta nuevos proyectos para fomentar la práctica de esta disciplina», concluyen. Los calisténicos de Baleares volvieron a volar en las barras de Santa Ponça, en Calvià.
Mallorca se ha convertido en una de las sedes más importantes de la calistenia a nivel nacional. Desde hace unos años, la Isla ha sido la sede de una serie de competiciones, talleres, exhibiciones y batallas que han contado con la presencia de los atletas, jueces y amantes de la Calistenia & Street Workout, llegados desde todos los puntos de la geografía nacional.
«La calistenia es un deporte que no entiende de géneros ni de edades. Por ese motivo, lo practican hombres, mujeres, niños, e incluso personas mayores. Se trata de realizar ejercicio con nuestro propio cuerpo y la evolución es constante», comenta Vera Khezina, una de las atletas femeninas más reconocidas del panorama nacional. Gracias a la gran repercusión y crecimiento de la comunidad, en los próximos meses se constituirá una asociación oficial que será la que regule el buen funcionamiento de los parques y ejerza de interlocutora con las administraciones.