Tras más de dos años cerrada, el pasado jueves, una renovada BCM volvió a lucir sus mejores galas. La espectacular sala de fiestas acogió a poco más de 700 personas. El aforo oficial es de 3.000 y se podían poner a la venta 1.800 tickets, pero el director de la sala, Jaime Lladó, prefirió no llenar este cupo para que hubiese incluso más espacio entre los asistentes. Para la fiesta inaugural la entrada general costaba 20 euros, con derecho a dos consumiciones, y las entradas VIP tenían un precio de 400 euros para un máximo de 4 personas. Cada asistente debía presentar el certificado COVID, una prueba PCR negativa (de máximo 72 horas) o un test de antígenos negativo (de máximo 48 horas).
Rebeka Brown y Wally López fueron los encargados de animar la velada, que se prolongó hasta las 5 de la madrugada. Brown es una de las figuras vocales más conocidas en la escena internacional de música electrónica. Wally López es uno de los dj's más reconocidos no solo de España sino también del panorama internacional. El buen ambiente y las ganas de fiesta fueron predominantes durante la velada.
Grupos de amigos acudieron al nuevo BCM.
Jaime Lladó, rodeado por los animadores de las veladas.
Este sábado unas 1.500 personas, distribuidas en las salas de Tito's y BCM, disfrutaron de una Nochebuena de reguetón con el artista dominicano Atomic Otro Way y, de cara a Nochevieja, se ha preparado una velada muy especial, donde los asistentes podrán disfrutar de las campanadas en sus pantallas gigantes.