Una denuncia a través de las redes sociales llevó al Auditori de Ferreries, la instalación pública que gestiona por concurso el Ateneu Musical de Ferreries, a cancelar la presencia del grupo mallorquín Ses Bubotes en el concierto Nit de Rock que se celebró el pasado 22 de diciembre en el Auditori.
Tres días antes de la fechas del concierto el colectivo transfeminista Ses Foneres denunció a través de Twitter y Facebook que la banda «tiene canciones con letras manifiestamente machistas que sitúan a las mujeres como objetos sexuales para su uso y disfrute». Dos días después y con el grupo ya desplazado a Menorca, se anunció un cambio en la programación que les dejaba fuera del espectáculo musical.
La denuncia de las feministas provocó, en las horas previas a la decisión final, un enfrentamiento a través de las redes sociales. El grupo aseguró que ninguna de las canciones supuestamente machistas están en su repertorio actual, a lo que Ses Foneres respondieron asegurando que «blanquear el repertorio no borra el disco duro».
Finalmente, el Auditori de Ferreries emitió un comunicado en el que aseguraba haberse visto involucrado involuntariamente en la polémica y en el que defendía respetar los argumentos del colectivo feminista y también la libertad de expresión, antes de anunciar la cancelación de la actuación para «evitar posibles polémicas».
Desde el Ayuntamiento de Ferreries aseguraron este jueves que la decisión ha sido del Ateneu Musical, entidad en la que está representada el consistorio; mientras su presidente, Joan Lluís Torres, explicó que los teloneros fueron contratados por el grupo principal, Pèl de Gall, que desde el Ateneu no conocían las canciones de Ses Bubotes y que fueron los Pèl de Gall los que expresaron su inquietud por la polémica generada: «Nosotros estamos en contra de este tipo de censura, fue una decisión conjunta con Pèl de Gall para evitar polémicas», señaló Torres, quien defendió la gestión que la entidad está llevando a cabo del Auditori.
Por su parte, el guitarrista de la banda, Miquel Sintes, atendió este jueves a este diario para lamentar tanto el fondo, como las formas: «Nos enteramos por Facebook un día antes que no estaríamos en el concierto», afirmó, al tiempo que negaba las acusaciones de machismo y recordaba el cariz humorístico de muchas de las letras del grupo, que ya en el año 2017, en un concierto celebrado en Felanitx, fue objeto de protestas por parte de otro colectivo feminista.
Entonces las protestas fueron acalladas por los vítores al grupo de los miles de asistentes al concierto. Sintes se mostró dolido por el hecho de que «una denuncia infundada pueda llevar a la cancelación de un concierto sin ni siquiera consultarnos» y subrayó su preocupación: «Más que la pérdida de dinero nos preocupa que se genere un precedente muy peligroso», en alusión a la censura recibida por una queja a través de Twitter. En cualquier caso destacó la oleada de mensajes de apoyo recibidos, «también por parte de mujeres menorquinas que no entienden lo ocurrido».