AGENCIAS-SANTA MARÍA
Santa María, una tranquila ciudad anidada a los pies de las
montañas de California, con una población de 85.000 personas,
acaparará la mirada internacional a partir de hoy, cuando comienza
el juicio contra Michael Jackson por abuso sexual de un menor.
Las autoridades colocaron barricadas alrededor de los tribunales de justicia, donde los camiones de televisión satelital se encuentran estacionados aguardando la llegada del rey del pop el próximo lunes, quien debe presentarse al juicio que enfrenta por presunto abuso sexual de menores.
Michael Jackson expresó ayer su convicción de que será hallado inocente, pero aclaró que está atravesando una «pesadilla».
Asimismo, desechó las acusaciones filtradas de sesiones del gran jurado en las que su supuesta víctima -ahora de 15 años- divulgó detalles sobre el presunto abuso sexual cometido por el otrora ídolo del pop.
Las transcripciones de la sesión del gran jurado citan a la supuesta víctima, quien dice que mientras él y Jackson estaban en la cama, el cantante le puso las manos por debajo de sus pantalones y comenzó a frotarlo. «Me estaba masturbando», relató el joven.
«En las últimas semanas, se difundió una gran cantidad de información horrible y maliciosa sobre mí», indicó Jackson en un video difundido este domingo en un sitio de internet de su club de fanáticos (www.mjjsource.com). El autoproclamado «rey del pop» indicó que en 2003 invitó a su supuesta víctima -un niño de 13 años enfermo de cáncer- y a su familia a su hacienda con parque de diversiones llamada «Neverland» («Tierra de Nunca Jamás»).
«Permití el ingreso de esta familia a mi casa porque me dijeron que su hijo estaba enfermo de cáncer y necesitaba mi ayuda. A través de los años, ayudé a miles de niños que estaban enfermos», resaltó Jackson, conocido como «Peter Pan». «Tengo fe en nuestro sistema judicial. Por favor mantengan un espíritu abierto y permítanme presentar mi caso ante el tribunal. Merezco un proceso justo», declaró.