El calentamiento del planeta ha provocado el mayor hundimiento de hielos registrado en la Antártida en los últimos treinta años, según declaró ayer un grupo de expertos norteamericanos. Una parte importante de la plataforma glacial «Larsen B», cuya formación se remonta a 12.000 años, se hundió en sólo 35 días, según indicó ayer el Centro estadounidense de Datos sobre Nieves y Hielos (NSIDC). La zona que se derrumbó recientemente representaba 3.250 kilómetros cuadrados, lo que supone un tamaño parecido al de la isla de Mallorca, que cuenta con una superficie de 3.640 kilómetros cuadrados. Situado en la parte oriental de la Península de la Antártida, «Larsen B» suscita desde hace años la preocupación de los científicos, que temen que sea víctima de los efectos del calentamiento climático. El bloque de hielo contenía 720.000 millones de toneladas de hielo.
Durante los cinco últimos años, esta extensión glacial ya perdió 5.700 kilómetros cuadrados y no cubre en la actualidad más que el 40 por ciento de su superficie mínima anterior. Según la página de Internet del centro, que depende de la Universidad de Colorado, la última fractura de esta plataforma de un espesor de 220 metros comenzó el pasado 31 de enero. «La parte hundida se desmembró en miles de icebergs, que navegan a la deriva en el mar de Weddell», precisa el organismo. «Se trata del acontecimiento de este tipo más importante de los últimos 30 años en la Península, que ha conocido muchos hundimientos. Han sido atribuidos a un recalentamiento climático notable en la región», prosigue el centro.
El NSIDC precisó que el nivel de calentamiento es del orden de los 0'5 grados Celsius por década y que esta tendencia se ha observado desde, por lo menos, finales de los años cuarenta. Desde 1974, alrededor de la Península, la superficie de las siete plataformas glaciares ha disminuido en aproximadamente 13.500 kilómetros cuadrados. El pasado mes de noviembre, el responsable del departamento de glaciología del Instituto Argentino de la Antártida, Pedro Skvarca, advirtió de un posible desmembramiento de «Larsen» a causa de la suavización de las temperaturas primaverales, y de un importante aumento en un 20 por ciento de las pérdidas de hielo de la plataforma.
Un investigador del NSIDC, Ted Scambos, indicó por su parte que el «Larsen» se ha desintegrado a causa de la presencia en su superficie de aguas estancadas procedentes del deshielo del pasado verano, en el que se registró un calentamiento. Ese agua acelera la fractura debido a que se infiltra en las pequeñas fallas del hielo y abre surcos en su grosor hasta el punto de romperlo.