El ex obispo emérito de Lusaka, Emmanuel Milingo, aseguró ayer que tras su reciente encuentro con el papa Juan Pablo II ha decidido «regresar a la Iglesia católica» y «renunciar a la convivencia con su esposa coreana».
La Santa Sede, en un comunicado oficial, reproduce el contenido de una carta en la que el prelado africano reitera públicamente su fidelidad al Pontífice, renuncia a su esposa y se aleja de la secta Moon, las tres condiciones exigidas por El Vaticano para levantar la excomunión que pesaba sobre Milingo.
La misiva, firmada por Milingo y fechada el pasado día 11 de agosto, está dirigida al Papa Wojtyla, y es reproducida por El Vaticano sin añadir ningún comentario. En ella, el obispo se dirige al cardenal Giovanni Battista Cheli, el número dos de la Secretaría de Estado vaticana, y al arzobispo Tarcisio Bertone.
Previamente, la esposa de Milingo, quien dice podría estar embarazada, comenzó ayer una huelga de hambre y dijo estar dispuesta a morir si el prelado renuncia a su matrimonio.