El duque de Edimburgo ha retirado su «Royal Warrant», el sello que acredita a un establecimiento como proveedor de un miembro de la familia real británica, a los grandes almacenes «Harrods», cuyo dueño, el egipcio Mohamed Al Fayed, pronunció duras críticas contra él en las últimas semanas. Según anunció hoy, jueves, el Palacio de Buckingham, la «Royal Warrant» no se renovará cuando expire a finales de este año. Según un portavoz, la decisión se tomó con independencia de los ataques de Al Fayed y se debe al progresivo descenso de las adquisiciones del duque en los grandes almacenes en los últimos años. Al Fayed había acusado en diciembre al duque, esposo de la reina Isabel II de Inglaterra, de estar detrás, junto a los servicios secretos británicos, de las muertes de su hijo Dodi y la princesa Diana de Gales hace dos años en París. Un portavoz de la casa «Harrods» confirmó que se ha recibido una carta de palacio acerca de la retirada de la «Royal Warrant» y subrayó que el contenido de la misiva no hacía referencia directa ni indirecta a las palabras de Al Fayed sobre el duque. Los grandes almacenes tienen hasta final de año para retirar de su fachada y sus embalajes el sello del duque, que le fue concedido por primera vez en 1956. En la actualidad, «Harrods» puede jactarse de ser proveedor de la reina, el duque de Edimburgo, el príncipe de Gales y la reina madre. Las «garantías reales», con una tradición que se retrae a la época medieval, se conceden cada cinco años, al término de los cuales se decide si se prorrogan. En la actualidad cerca de ochocientas firmas comerciales en el Reino Unido disfrutan de la «Royal Warrant».
Harrods pierde al duque de Edimburgo como cliente
Efe |