El presidente del Gobierno, José María Aznar, animó ayer a las mujeres víctimas de malos tratos a que «sin ninguna duda denuncien la violencia que sufren porque es luego responsabilidad de los poderes públicos el poner los mecanismos de protección a que esa mujer tiene derecho», durante su intervención en un seminario sobre la mujer, organizado por Trabajo y Asuntos Sociales.
Para Aznar, la violencia doméstica es «lo más sagrante, lo más inaceptable y los más intolerante», por ello señaló que reconocer que se tiene un problema es el mejor modo de empezar a solucionarlo. «Practicar una política de este tipo significa que las denuncias aumentan "dijo", y eso es muchísimo mejor que no denunciar y no saber el nivel de violencia doméstica que hay en un país. Es básico que los poderes públicos, la sociedad y las propias víctimas, tengan la responsabilidad de denunciar y atajar estas cuestiones».
Por otro lado, reconoció que, aunque en España se ha avanzado mucho en poco tiempo en la equiparación entre hombres y mujeres, se tiene que avanzar todavía mucho más porque «queda mucho por hacer, mucho por aprender y muchas decisiones que poner en la práctica». En este sentido, resaltó que una buena política de empleo es entre otras cosas una buena política para la mujer. «En España, hemos procurado avanzar en la sociedad de las oportunidades, que es la clave de la sociedad del futuro.