Esta medianoche, todavía con la resaca del eclipse de sol, se podrá observar la «lluvia de estrellas» más intensa del año, protagonizada por las Perseidas, popularmente conocidas como las «lágrimas de San Lorenzo». Este año, la luz de la Luna no eclipsará el espectáculo, ya que al encontrarse en fase de luna nueva ésta no refleja luz y no se ve desde la Tierra, por lo que el fenómeno se podrá observar con total claridad en el firmamento, según indicó Paco Colomer, del Observatorio Astronómico Nacional.
No obstante, aunque esta «lluvia de estrellas» ya se deja ver en algunas zonas desde hace algunos días, será esta medianoche cuando será más visible. En concreto, esta noche, si la climatología no lo impide, podrán verse entre 200 y 400 estrellas fugaces por hora en dirección a la Constelación de Casiopea. El otro máximo se podrá observar en la madrugada de mañana, aunque en España resultará casi imposible ver nada, debido a la luz del Sol.
Por ello, Colomer aconseja aprovechar la ocasión esta noche, dado que la luz de la luna no impedirá ver el fenómeno, para tumbarse en el suelo a medianoche, en dirección a la Constelación de Casiopea, que se puede identificar fácilmente porque tiene forma de W, situada en dirección este, con la vista fija a unos 50 grados sobre el horizonte.
El fenómeno de la «lluvia de estrellas» se produce cuando la Tierra cruza la órbita de un cometa, en este caso del cometa «Swift-Tuttle», que ha dejado a su paso partículas de polvo interplanetario. En realidad, según explicó Colomer, no se trata de estrellas, sino de partículas de un milímetro de diámetro que al entrar en la atmósfera terrestre, a una velocidad de 60 kilómetros por segundo, se queman y producen una estela brillante similar a la que producen las estrellas.