Las compañías multinacionales madereras que operaban en el Sudeste Asiático y en Africa Central se han trasladado a la Amazonia y han agravado la devastación en el considerado «pulmón del mundo», según un informe divulgado ayer en Río de Janeiro por la dirección mundial de Greenpece.
Las actividades madereras en la Amazonia, en un 80% ilegales, fueron responsables de la destrucción de 1'5 millones de hectáreas de selva tropical nativa sólo en 1997, según el documento en defensa del medio ambiente, que fue presentado por el director ejecutivo de Greenpeace Internacional, el alemán Thilo Bode. El Sudeste Asiático y Africa Central, la Amazonia se convirtió para las Compañías Multinacionales Madereras (CMMs) en la principal fuente de madera tropical para las próximas décadas», advirtió el director de Greenpeace Internacional. «Las actividades madereras que se realizan sustentablemente en la Amazonia, es decir, con respeto al medio ambiente y garantizando la renovación de las áreas taladas, es de prácticamente el 0%», explicó Ruy de Góes, coordinador de la Campaña de la Amazonia de Greenpeace Brasil. La organización ecologista, que investigó a 17 CMMs instaladas en la Amazonia, indica que casi su totalidad -15- no tienen planos para obtener el certificado mundial de explotación maderera sustentada que otorga el Consejo de Gestión Forestal.
Sólo una de las 17 multinacionales, la Mil Maderas, tiene el certificado.