Es Capdellà celebró este domingo la VIII Fira de Tardor, en un domingo con una climatología espléndida que consiguió que más de cinco mil personas acudieran a la cita. Las calles de l’Església, Major, la plaza de Joan Nogués y la plaza de Sa Vinya, se llenaron con más de 60 expositores en los que se incentivó el comercio local, como viene siendo habitual estos días en las ferias.
Este año no se han podido exponer ovejas, ni cabras, por la epidemia de la lengua azul, pero se si se que se ha llevó a cabo una exposición de burro y cerdo balear, además de una muestra de apicultura, manteniendo y difundiendo así la tradición agrícola del pueblo.
Las actividades enmarcadas en esta celebración fueron más allá de ayer. Empezaron el pasado 3 de noviembre e incluyeron actos solidarios, culturales o incluso un encuentro con el mundo rural , en el que por primera vez un payés local fue homenajeado.