Vecinos de las nueve urbanizaciones de Llucmajor denuncian que continúan con molestias, malos olores y moscas a consecuencia de la actividad de la granja avícola ubicada en la finca de s’Allapassa, en la misma localidad. Cabe recordar que los vecinos han denunciado en reiteradas ocasiones esta situación. De hecho, hace más de dos años ya se organizó una manifestación en frente de la administración local de Bahía Grande para exigir soluciones.
En este sentido, los vecinos afirman que «no entendemos la pasividad de las administraciones cuando conocen bien la situación». Además lamentan que «en el mes de abril de este año se presentaron denuncias y documentos gráficos sobre el estado en que se encuentra la zona a la Conselleria, a los agentes ambientales y también al Ajuntament de Llucmajor. Estamos en noviembre y aún no sabemos en qué situación está este expediente», critican.
Ante esta situación los afectados han difundido vídeos e imágenes en los que se pueden ver, según los mismos vecinos, gallinas ponedoras muertas y enterradas en acequias además de vertidos y estiércol que, según ellos, procederían de la granja. Este periódico se ha puesto este lunes en contacto con la propiedad de la granja de Llucmajor para dar su versión, aunque ésta ha declinado hacer declaraciones.
Los vecinos recuerdan que «en 2022 se confirmó que la explotación no tenía la autorización ambiental integrada. Aunque se sancionó a la empresa, desconocemos las medidas cautelares que se han dictaminado porque la granja sigue en activo pese a que la ley dice específicamente que una actividad que ya está funcionando y carece de autorización ambiental debe paralizar dicha actividad inmediatamente, y después, proseguir con los trámites, algo que en esta ocasión no ha sucedido», aseguran.
Por su parte la Conselleria d’Agricultura, Pesca i Medi Natural ha llevado a Fiscalía la situación de dicha granja.