El Ajuntament d'Alcúdia ha encargado un Plan Estratégico de Turismo y Gestión Inteligente de la ciudad 2025-2029, un proyecto que ha comenzdo por un análisis de las políticas municipales actuales y de la percepción que tienen los residentes y negocios de Alcúdia respecto a la actividad turística. La iniciativa llega en pleno debate sobre el modelo turístico y la saturación, que en Alcúdia tiene dos frentes abiertos: la protesta realizada por la plataforma Menys Turisme Més Vida el domingo pasado y la movilización contra los nuevos balnearios que se están construyendo en la playa.
El objetivo de este Plan Estratégico es disponer de herramientas para gestionar el destino turístico, que son «una estrategia que sirva como hoja de ruta para la política turística; y un plan director de Destino Turístico Inteligente que oriente a Alcúdia hacia un nuevo modelo de gestión innovador basado en la gobernanza y gestión de los datos». Así se desprende del informe preliminar presentado por Sien Consulting, adjudicataria del proyecto.
Participación social
La elaboración del plan consta de cuatro pilares: la revisión de la situación actual de Alcúdia como destino turístico; trabajo de campo para identificar a pie de calle las necesidades reales del municipio; un diagnóstico basado en las últimas tecnologías aplicadas a la gestión turística, y la participación social.
Para sondear a la población, entre otras cuestiones se pregunta a los vecinos cuáles son las principales fortalezas y problemas de Alcúdia como destino turístico; si consideran que los recursos culturales y patrimoniales están adaptados al uso turístico o qué lugares consideran que necesitan más atención. La encuesta también pide ideas para hacer de Alcúdia «un destino aún más increíble y sostenible», y que escojan dos segmentos en los que el municipio aún podría crecer como turismo cultural y patrimonial, deportivo, gastronómico, MICE o termal.
Hasta la fecha han respondido al cuestionario 188 ciudadanos. Otros vecinos han plasmado sus opiniones en las redes sociales del Ajuntament d'Alcúdia. Básicamente, reclaman que «se mire más por los ciudadanos y no tanto por los turistas» y lamentan «la ocupación masiva del espacio público»; los problemas de circulación y la falta de aparcamiento; el encarecimiento de la vivienda, entre otras cosas, y reclaman más servicios públicos como escuelas infantiles, una residencia de mayores y una piscina municipal, servicio del que Alcúdia no dispone en la actualidad.