Algunos de los representantes municipales que Vox tiene repartidos en la Part Forana han denunciado «la dictadura que tenemos con este Comité Ejecutivo Provincial», a raíz de un reglamento interno general para los cargos electos que han enviado a todos los concejales a través de un chat intermunicipal, «en el que ni te dejan contestar al estar vetado el poder escribir».
Estos concejales críticos acusan a la presidenta de Vox Baleares, Patricia de las Heras, de «tirarse flores y poner a parir a los cinco diputados del Parlament» y aseguran que «si el reglamento que nos han enviado se sigue al pie de la letra, la presidenta debería ser sancionada por sacar información confidencial y dañina hacia el partido, atacando a miembros de la formación».
También tienen quejas hacia Gabriel Le Senne, «que se ha reunido de forma clandestina en un bar con gente del PSOE y Més para poder cambiar la ley del Parlament, cosa que no parece muy patriota ni de Vox, aunque luego se llenen la boca diciendo que son más de Vox que nadie".
Cabe recordar que algunos concejales de Vox en ayuntamientos como Alcúdia, Lloseta y Esporles anunciaron que dejarían el partido si los cinco diputados críticos acababan expulsados.