El Pla de Mallorca se postula como un destino sostenible y con una firme apuesta por el turismo rural y genuino. Los 14 municipios que integran la Mancomunitat ofrecen, en su interior, innumerables atractivos de carácter patrimonial, paisajístico o gastronómico que los convierten en un reclamo turístico de primer orden. El nuevo Plan Estratégico de Turismo (PET), presentado ayer en el Consell, marcará la ruta a seguir con horizonte 2030.
Se trata de un ambicioso documento impulsado por la Mancomunitat que desgrana las principales debilidades y amenazas, así como las fortalezas y oportunidades de este territorio para saber el turismo que se quiere en el futuro. Su objetivo es fomentar una gestión sostenible a partir de los recursos existentes.
El director insular para la Governança i Sostenibilitat del Consell, Pedro Mas, junto con la presidenta de la Mancomunitat, Joana Maria Pascual, y Jorge Vallina en representación de la empresa Global, Consultoría y Turismo, dieron a conocer este plan que ha sido posible «gracias a la ayuda del Consell», en palabras de Pascual.
La presidenta destacó que «el objetivo es establecer estrategias conjuntas para impulsar un turismo responsable en los 14 municipios que conforman el Pla. Debemos lograr, entre todos, hacer de Mallorca un destino que preserve los valores y la cultura que hacen de la Isla un destino especial».
El plan señala como fortalezas «la ubicación estratégica en el centro de la Isla, su autenticidad y atributos genuinos únicos que caracterizan al territorio». Otros valores que destaca como identidad colectiva son: «mallorquinidad, ruralidad, tranquilidad o tradición».
Amenazas
Entre las debilidades se recoge la ausencia de políticas de planificación y coordinación de la actividad turística en la comarca y entre los municipios o la sobresaturación y problemas de movilidad por falta de ordenación de la circulación de cicloturistas en temporada media-baja. Desde el Consell, Mas mostró su apoyo a esta iniciativa a la vez que recordó que «el turismo es el principal motor económico de Mallorca, y nuestro objetivo es mejorar la convivencia de la isla dentro de un marco de desarrollo sostenible de la actividad turística». Añadió que «gracias a este tipo de actuaciones y, entre todos, convertiremos el Pla de Mallorca en un destino sostenible, en el que el turismo contribuya al desarrollo rural equilibrado, ofrezca nuevas oportunidades laborales y mejore la calidad de vida local».
La Mancomunitat recibió 3 millones de euros de los fondos europeos para diseñar un Plan de Sostenibilidad Turística. Pascual explicó que «ahora se están haciendo rutas, campañas de potenciación, entre otras cosas».