El 27 de marzo de 2022 se colocó en Sabadell una Stolpersteine (piedra de la memoria) dedicada a Maria García Sanchís, una de las cinco milicianas ejecutadas por los falangistas en Manacor el 5 de septiembre de 1936 (este martes se cumplen 87 años), pero el Ajuntament de Barcelona ha olvidado a sus milicianas pese a la petición expresa que realizó Memòria hace ya un año para que se colocaran otras tres Stolpersteine en su ciudad.
La asociación memorialista presidida por Maria Antònia Oliver, ha enviado ahora un nuevo escrito en el que insta la corporación municipal a instalar (a las puertas de las casas que habitaban las víctimas) las piedras de la memoria que aún custodia el Govern de les Illes Balears. Solicita además «que se haga un acto público institucional en cada una de las instalaciones con el consenso y la asistencia de sus familiares y representantes del Ajuntament de Barcelona y los gobiernos de Cataluña y Baleares.
En su escrito Maria Antònia Oliver recuerda que el investigador manacorí Antoni Tugores (experto en la represión franquista en Manacor) señala que después de matar a las milicianas «durante muchos años se decía en el pueblo que eran prostitutas». «Por eso declara en sus estudios que las mataron dos veces, física y moralmente», dice la presidenta de Memòria. «No nos gustaría tener que añadir, al negarse su ayuntamiento a atender las peticiones de sus familias para recordarlas y homenajearlas, que fueran tres las veces que las mataron», advierte Oliver. Oliver recuerda que hace un año ya remitieron un escrito muy similar al Ajuntament de Barcelona. «Lo volvemos a hacer ahora con la esperanza de que esta vez nos escuchen, a nosotros y a las familias de estas mujeres», concluye.
El Govern balear incorporó en 2021 el proyecto de las Stolpersteines/Remembrance Stones. Hasta ese momento eran adoquines pensados para homenajear a las víctimas del nazismo diseñados (en latón) por el artista alemán Günter Demnig. A partir de esa fecha se crearon nuevos adoquines (en acero) para homenajear a las víctimas del franquismo. De las cinco milicianas que se embarcaron con Bayo (cuyos cuerpos pueden haber sido localizados en la fosa de Son Coletes) solo se conoce el nombre de cuatro. Son, además de Maria García Sanchís (que vivía en Sabadell), las hermanas Mercé y Daria Buxadé Adrover y Teresa Bellera Cemelia, que residían en Barcelona. Para su identificación completa habrá que esperar a los resultados de las pruebas de ADN.
Las Stolpersteine se tenían que poner ante las casas en las que residieron pero «el Ajuntament de Barcelona se negó en redondo, incluso sabiendo que el Govern de les Illes Balears se había hecho cargo de su coste y que las familias estaban de acuerdo y eran conocedoras del proceso. Hoy todavía esperamos el visto bueno por parte del Ajuntament para poder instalarlas allí donde vivieron, según los datos aportados por familiares e investigadores, entre ellos Gonzalo Berger), indica la presidenta de Memòria de Mallorca.