La red de refugios del Consell prevé cerrar el 2023 con un récord de visitantes. En 2022 se contó con un total de 27.428 personas y las previsiones iniciales es que se superará este número. La temporada se reabierto el 16 de agosto tras un periodo de quince días de cierre por vacaciones y los indicadores reflejan una ocupación exitosa de aquí a finales de año con más de 3.502 plazas ocupadas. Solo para este mes hay 514 reservas de excursionistas.
Son Amer, Tossals Verds, Muleta, Coma d'en Vidal, can Boi, Pont Romà y Galatzó forman parte de esta red de refugios con capacidad total para 332 plazas. La segunda temporada alta del año se sitúa entre septiembre y noviembre con la máxima ocupación de usuarios en octubre. Entre los meses de enero a julio, la red de refugios ha acogido a un total de 20.448 usuarios frente a los 15.779 que disfrutaron de estas instalaciones en el mismo periodo en 2022.
El director insular de Medi Ambient, Luís Rubí, se ha referido a los datos de ocupación muy alta que están teniendo los refugios "una tendencia que nos hace prever que se superará la cifra de 2022". Destacó que «ya tenemos 3.502 personas que han hecho reservas en alguno de los refugios, lo que hace pensar que podremos cerrar con récord de alojamientos».