El diseño y el estado en que se encuentra el futuro Pump Track de Palmanyola, la primera instalación de este tipo que se espera poder abrir en Mallorca, ha provocado la indignación de los potenciales usuarios de este recinto, cuya construcción ha promovido la Entidad Local Menor, quienes han mostrado sus quejas por el diseño del mismo y la peligrosidad de un trazado que definen como «peligroso». Algo que contrasta con la expectativa generada entre los vecinos de la zona.
A través de las redes sociales, la página Enduro Downhill Mallorca, que reúne a los aficionados y practicantes de estas modalidades ciclistas, ha publicado un duro escrito, acompañado de imágenes del recinto y su estado a la espera de poder abrirse, en el que critican duramente el diseño de la instalación y dejan patente los riesgos que para sus usuarios pueden llevar consigo. «Está mal diseñado de principio a fin, el recorrido no tiene sentido, peraltes con forma triangular, cerrados e incompletos que te dejan vendido a mitad de curva, montículos de diferente tamaño, cortos y demasiado empinados que hacen que te tragues el siguiente y no puedas bombear para mantener la inercia, un desastre, la pista no sirve para nada más que hacerte daño», aseguran en Facebook.
Unas tesis que suscriben algunos de los que mejor conocen el funcionamiento de este tipo de recintos en la Isla. Es el caso de Nico Alemany, popular 'rider' que ya en 2013 planteó al Ajuntament d'Andratx la construcción de un espacio de este tipo. «No se puede utilizar, los pedales pegan en las crestas, las curvas no dan inercia constante... Debe ser algo fluido el moverse por un Pump Track, no tienes que dar pedales y aquí no es así», explica Alemany, quien viendo el proceso de construcción y el resultado final anticipa que «el asfalto puede bachearse, deformarse el circuito, y ya vemos que la tierra revienta y afecta a la capa superior y el asfalto y no está abierto», prosigue, dejando claro en resumidas cuentas que «está mal diseñado y es peligroso».
Por ello, tiende la mano a los responsables de su construcción, la Entidad Local Menor de Palmanyola, a la hora de poder aconsejar para cambiar los puntos conflictivos, y se pone a disposición de los responsables del espacio. «Hay que tener conocimiento de la bicicleta o el skate, además de construcción, pero si estamos a tiempo, habría que intervenir», añade.
En la misma línea se manifiesta el deportista, activista y promotor Yaroslav Alpízar, quien ya hizo saber su preocupación en la sección de Participación de Última Hora, y recalca que es una instalación «mal diseñada», señalando que «puede provocar accidentes, pues no hay fluidez, ves muchos desniveles encadenados, asfalto irregular, imperfecciones técnicas, ondulaciones diferentes... defectos y un diseño incorrecto que puede ser peligroso para sus usuarios», explica.
Además, deja muy claro que estos potenciales usuarios que conocen otros Pump Tracks y su buen uso «somos los primeros interesados en que salgan adelante estos proyectos, pero bien hechos», y pone como ejemplo «para que se haga una idea, lo de Palmanyola es como si se hubiera construido una pista de tenis triangular», lamentando que «podría haber sido un ejemplo para otros pueblos».
«La única manera de salvarlo es rehacerlo, con una buena opinión técnica detrás, o reasfaltar», afirma a la vez que espera «que estén a tiempo de reconducir la situación, pues sería una pena», concluye Alpízar, que recoge la decepción y quejas que se han expandido por grupos de WhatsApp y redes sociales al conocer el diseño y estado del Pump Track de Palmanyola.
Consultado al respecto, el responsable de la Entidad Local Menor de Palmanyola, Arnau Llinàs se mostró «sorprendido» por las críticas a la instalación, informando de que el coste del proyecto, que comprende la mejora y adecuación de todos los espacios y una zona de Calistenia, ronda los 100 mil euros. El alcalde pedáneo se muestra «abierto a escuchar» a quienes señalan estas incidencias y apunta que «todavía estamos a tiempo de arreglarlo, pues la obra tiene un periodo de garantía con la empresa constructora». El Pump Track de Palmanyola sigue cerrado al público a la espera de finalizar el proceso legal para proceder a su apertura.