La porcella peligra en las comidas de Navidad de este año en Mallorca, ya que la producción se ha reducido debido al incremento de los costes. Así lo confirman todas las fuentes consultadas por Ultima Hora, que también ha podido constatar las dificultades para encontrar este producto típicamente mallorquín en diferentes establecimientos comerciales.
«No hay porcellas porque se han arruinado muchos de las que tenían». Así de contundente se expresa Jaume Pocoví, uno de los productores de estos animales. En su caso mantiene la explotación, pero ha pasado de tener 130 cerdas a 30 en sólo dos ejercicios. Este sector lleva años en crisis pero, con motivo de la guerra de Ucrania, el precio de los alimentos de los animales se ha disparado. «No hay lechonas mallorquinas porque no es posible producirlas», afirma.
Pocoví reconoce que este año las porcellas se están vendido más caras debido a la poco oferta existente en el mercado, pero sigue siendo insuficiente para garantizar la viabilidad de sus negocios. Además, se ha convertido en un producto que se consume principalmente en estas fechas, por lo que durante el resto del año baja la demanda y su precio vuelve a descender. Se trata de un producto que se vende según la lonja; actualmente está a unos 60 euros, mientras que en el mercado cuesta entre 120 y 150 euros, en función de la calidad.
La gerente de Ramaders Agrupats, Margalida Obrador, expone que «llevamos años en los que la producción de porcella se reduce, pero este año, debido al aumento de los costes, ha sido aún mayor». Ante esta situación, no sabe si podrán dar respuesta a todas las peticiones de los ciudadanos, que señala que se mantienen similares o inferiores a la de hace unos años.
El presidente de la Asociación de Porc Negre de Mallorca y uno de los propietarios de Can Company, Miquel Company, corrobora el descenso de producción debido al aumento del coste de los piensos, entre otros. «Hay muy poca producción porque no es rentable. Para trabajar perdiendo dinero, se quitan animales», justifica. En su opinión, la demanda sí es más elevada este año, recuperándose así las cifras previas a la pandemia de la COVID-19; desconoce sí podrá dar respuesta a todas los encargos.
Problemas con los cerdos que vienen de la Península
El presidente de la Asociación de Carniceros y del mercado del Olivar de Palma, Jaume Aguiló, informa que los productores ya le han advertido de la escasez de porcellas. Sin embargo, duda de que pueda ser una estrategia para subir los precios. Además, precisa que se trata de un problema que se encuentran cada año, debido al incremento del consumo que se produce por estas fechas. En este punto, sostiene que no se encuentra preocupado por la incertidumbre de no poder atender todas las peticiones de sus clientes, puesto que hay otro tipo de carnes alternativas. No obstante, reconoce que con otro tipo de cerdos procedentes de la Península, como el típico cochinillo de Segovia, también están teniendo problemas de abastecimiento.
El apunte
La Conselleria d'Agricultura dará ayudas
La escasez de porcellas inquieta a la Conselleria d'Agricultura. «Estamos preocupados y somos conscientes de la disminución de la cabaña porcina», declaran fuentes del departamento liderado por Mae de la Concha. No obstante, lanzan un mensaje de tranquilidad, ya que «vemos la evolución con el sector y también sabemos que se recupera más rápido, por ejemplo, que la de vacuno».
Ante esta situación, están redactando una ayuda para los sectores que el Ministerio de Agricultura dejó fuera, cómo el porcino y la patata. Esto es posible puesto que ha se ha aprobado el reglamento comunitario que lo permite. La intención es que estas ayudas puedan salir a principios de 2023. El objetivo es aminorar el incremento de precios de los piensos y los cereales, que representan el 80 % del total de los gastos de producción.