La llegada masiva de turistas, el buen tiempo y las ganas de salir de los residentes en la capital palmesana vuelven a hacer estragos en las carreteras de la Isla. Buena muestra de ello es el enorme colapso que se ha vivido en las últimas horas de este domingo en la carretera de Alcúdia, con restricciones kilométricas.
Buena muestra del atasco que se ha vivido este domingo es que la imagen que ilustra esta noticia está tomada al final de la autopista Inca-Sa Pobla, por lo que pueden imaginar el nivel de colapso circulatorio vivido en la zona.
A media mañana, las playas de Alcanada y Sant Pere, en la zona de Alcúdia, tuvieron que ser cerradas al público al superarse el aforo permitido. Y es que el primer fin de semana de canícula del verano, con temperaturas que han rondado entre los 29 y 33 grados, ha hecho que la gente se lance en masa a los arenales de la Isla.