El Ajuntament de Consell no tiene previsto reabrir por ahora el rastro, pese a la demanda de los vendedores, que llevan desde el inicio de la crisis sanitaria sin poder vender, a excepción de cuatro domingos de agosto en que sí se pudieron montar los puestos.
La teniente de alcalde, Margalida Llabrés, apunta que «por precaución y responsabilidad, no abriremos el rastro hasta que toda Mallorca entre en la fase 1 de situación epidemiológica; y no será antes de Navidad, visto como están las cosas».
Actualmente toda Mallorca está en nivel 3, definido por la Conselleria de Salut como «situación de alto riesgo». Aún así, el Govern permite la celebración de mercados ambulantes con un límite del 75 por ciento de los puestos que se montaban habitualmente antes de la crisis sanitaria. Sin embargo, este mismo nivel 3 mantiene las ferias y fiestas como actividades de «alto riesgo».
Actualmente, en todo el archipiélago balear solo Formentera está en nivel 1. Con los datos actualizados a 6 de diciembre, Formentera tiene 0 casos activos en Atención Primaria, por los 2.993 de Mallorca. A estos últimos hay que sumarle 135 pacientes ingresados en planta y 36 en UCI.
Vistas las cifras, no parece verosímil que Mallorca pueda reducir pronto su nivel de contagios para entrar en fase 1. El rastro de Consell tendrá que esperar.
Los vendedores reclaman abrir con medidas
Vendedores del rastro han expresado sus quejas porque el mercadillo continúe suspendido, «cuando otros más grandes, como el Dijous de Inca, o el rastro de Marratxí, se celebra con medidas de seguridad». El rastro fue suspendido en marzo con el estado de alarma, y se reabrió en agosto durante 4 semanas. Ante el avance de la Covid-19 se suspendió sine die.