Los vecinos de Santa Maria lamentan cierta dejadez de las autoridades municipales con respecto al aparcamiento que se encuentra a la entrada de la localidad desde la salida de la autopista y cerca del colegio público pues desde hace semanas, y como si se tratara de un desguace en miniatura, hay varios coches abandonados y nadie hace nada al respecto.
Resulta hasta paradójico que en este espacio se encuentre un cartel como advertencia que recuerda que, según la ordenanza municipal, tirar basura o depositar residuos se sancionará con multas que van de los 750 a los 3.000 euros.
Según explican vecinos de la zona, el pasado fin de semana se alertó a la Policía Local de que sobre la medianoche un grupo de jóvenes se encontraba golpeando los vehículos abandonados, «quizás para llevarse piezas» o por simple vandalismo. «Un agente en solitario fue al lugar de los hechos 15 minutos después pero los presuntos ya se habían marchado, y evidentemente no levantaron ningún parte».
Según narran es habitual que se formen botellones en el aparcamiento, especialmente cuando el tiempo es más cálido, y no sería la primera vez que se registra algún incidente con los vecinos a altas horas de la mañana en las inmediaciones del aparcamiento.
Entre los coches destrozados que se encuentran actualmente en el aparcamiento hay alguno de alta gama e incluso con la matrícula perfectamente identificable.
Los vecinos echan en falta más iluminación y vigilancia. «Es un peligro para el resto de coches del párking, sin contar la dejación de funciones del ayuntamiento. Lo lógico sería ponerle unas pegatinas a los coches de aviso de retirada e incluso precintarlos».
«Hay vecinos que sacan a sus perros a pasear por el párking, con el peligro que supone pisar cristales, sin contar lo que supone de contaminación no controlada que, con el viento, los fragmentos de los coches hechos añicos se dispersen por todos los campos adyacentes», lamentan.