Frente a las críticas determinados grupúsculos contrarios a la prolongación de la autopista de Llucmajor hasta Campos, la consellera de Territori i Infraestructures del Consell de Mallorca, Mercedes Garrido, se desplazó este miércoles hasta el municipio campaner para supervisar in situ el inicio de las mencionadas obras viarias.
Acompañada por el alcalde Sebastià Sagreras (PP), Garrido estuvo despachando con los técnicos y operarios que han iniciado los trabajo de desdoblamiento de la carretera Ma–19 que conecta Campos con Llucmajor, vía conocida bajo el nefasto calificativo de ‘la carretera de la muerte'.
Estos días, la Unión Temporal de Empresas (UTE), conformada por Constructora Pirenaica y Aglomerados de Felanitx, que se ha adjudicado las obras, está llevando a cabo trabajos de señalización previos a la entrada en liza de la maquinaria pesada.
Las obras se iniciarán en el lado de Campos con los trabajos de embellecimiento de la entrada al pueblo. Posteriormente se continuará con el desdoblamiento propiamente dicho de la carretera, que concluirá en la rotonda de la variante de Llucmajor.
A un kilómetro, aproximadamente, de la entrada a Campos, en las inmediaciones de antigua carretera de Palma, ya se han ocupado una serie de parcelas en las que se han depositado los áridos necesarios para construir la autopista, así como barreras de protección y maquinaria pesada.
Cabe recordar que la prolongación de la autopista de Llucmajor hasta Campos cuenta con el apoyo unánime de todos los partidos representados en el Consell.