El día 7 de septiembre Fornalutx celebrará un año más su fiesta centenaria de la ‘Baixada des Bou'. Por segundo año consecutivo el festejo se celebrará según las estrictas condiciones de la Ley Balear de Protección Animal, que ya no permite sacrificar el animal, como era costumbre secular en el pueblo, para repartir después su carne entre los miembros de la comisión.
Sin embargo, este año Fornalutx –después de conseguir salvar su fiesta in extremis– también recuperará la tradición de repartir la carn des bou. Esto será posible gracias a que el empresario solleric Vicenç Sastre, propietario de la extensa finca del Teix, regalará al municipio una res de raza mallorquina de las que pastan por su possessió, para que el Ajuntament reparta su carne después de la fiesta.
Vicenç Sastre comunicó este lunes al alcalde, Antoni Aguiló, que había decidido hacer este regalo «porque mi abuelo era de Fornalutx y le hubiera gustado mucho que esta tradición se mantuviera igual que cuando él era joven». La res, valorada en unos 900 euros, pertenece a la ganadería de cría de bueyes de raza mallorquina de Jaume Estrany, de la granja Mancor, que tiene unos 40 animales pastando por el Teix, en pleno corazón de la Serra de Tramuntana. El alcalde, acompañado de los concejales Andreu Barceló y Jaume Sastre, se mostró muy satisfecho.