La Guardia Civil y la Policía Local de Llucmajor han realizado este martes un balance «muy positivo» sobre la seguridad que ha habido en el municipio durante el pasado verano.
La delegada del Gobierno en Baleares, Maria Salom, ha copresidido la Junta Local de Seguridad de Llucmajor junto al alcalde Bernardí Vives, en una reunión celebrada en el Consistorio en la que también han participado el teniente coronel de la Guardia Civil, Antonio Orantos, mandos de la Benemérita y de la Policía Local.
En el encuentro han valorado la «magnífica coordinación» entre ambos Cuerpos. Durante los meses estivales la Guardia Civil ha realizado un «despliegue sin precedentes en el municipio», con unidades especiales de actuación destinadas principalmente al núcleo turístico de s'Arenal, ha informado Delegación del Gobierno.
Este refuerzo estival se ha traducido en operaciones que han permitido, entre otras actuaciones, la desarticulación de una banda de carteristas rumanos o el desmantelamiento de 'Los Lobatos', una banda organizada dedicada a la comisión de robos con fuerza en empresas que operaba en varios municipios, entre ellos Llucmajor.
Finalmente, en la reunión se ha valorado la aprobación de una ordenanza cívica municipal que «ayudará a luchar contra la venta ambulante», ha asegurado la Policía Local, sobre todo la temporada de 2018 cuando esté plenamente operativa -se aprobó a mitad de este verano-. Con esta normativa la Policía Local podrá luchar mejor contra la venta callejera y también beneficiará que la Guardia Civil pueda perseguir a las mafias responsables de los productos falsificados incautados.