La primera gasolinera de bajo coste que se abrió en Mallorca, concretamente en la avenida del Mar Mediterráneo en el polígono de servicios Son Bugadellas, en el municipio de Calvià, el pasado dia 2 de julio se ve forzada a cerrar por un período de tiempo indefinido por la competencia y guerra de precios que ha mantenido especialmente con la estación de servicio de la carretera de Santa Ponça a Calvià Vila ubicada también en el mismo polígono a apenas unos 200 metros de la anterior.
Desde el primer día de apertura de la low cost la otra estación convencional ha rebajado tambien entre ocho y diez céntimos de euro el litro de carburante con el consiguiente beneficio para los consumidores pero en detrimento de la empresa Buga 2000, promotora de la low cost que ha podido resistir la feroz competencia pero que deberá cerrar por orden judicial a instancias de la rivalidad.
La empresa propietaria de la otra gasolinera ha presentado denuncias contra el Ajuntament de Calvià por presuntas irregularidades en las licencias concedidas y el juzgado número tres de Palma ha decretado como medida cautelar y por tiempo indefinido hasta que haya una resolución firme la paralización de la actividad.
La asociación de comercios turísticos ACOTUR ha hecho público un comunicado en el que lamenta el cierre de la gasolinera low cost puesta en marcha por «pequeños empresarios emprendedores del municipio que han avalado con su patrimonio personal este proyecto que contaba con todas las licencias correctas y que ahora se vaya al garete sin más».
ACOTUR ha querido asimismo resaltar su apoyo a pequeñas empresas como Buga 2000 frente al «monopolio de multinacionales que impiden el libre mercado» en referencia a la gasolinera convencional de Son Bugadellas que pertenece a una empresa propietaria de numerosas gasolineras en Mallorca.
Una vez conseguido el cierre de la competencia de bajo coste los consumidores temen que la citada estación de servicio convencional vuelva a subir los precios.