La secretaria general del PSIB, Francina Armengol, presentó la noche del sábado a Miquel Cabot como candidato socialista a la Alcaldía de Marratxí, con el objetivo de iniciar un cambio en un municipio «cansado de alcaldes y presidentes que se preocupan más de sus negocios que de la gente».
Cabot se ha comprometido a realizar una auditoría económica al Ayuntamiento «que ponga luz a una gestión demasiado oscura de las cuentas municipales marcados por la elevada deuda pública; bajar el IBI y aliviar un poco los bolsillos de los ciudadanos de los elevados impuestos que pagan en Marratxí», ha informado el PSIB en un comunicado.
También se comprometió a «revisar la concesión del servicio de agua que ha hecho el PP para intentar que vuelva a ser patrimonio de todos los marratxiners.
Cabot aseguró que su proyecto se basa en la participación, la transparencia y la priorización de las políticas sociales, algo que considera que «choca con la ausencia total de proyecto del PP que ha dejado dormido en el municipio después de 12 años de gestión municipal».
La candidata al Govern defendió la necesidad de que Cabot sea elegido alcalde: «Es el tiempo de la política, pero de una nueva manera de hacer política que devuelva a las raíces, trabajando con el corazón y sintiendo todo lo que defendemos y que vuelve a estar en entredicho por las políticas del PP de esta legislatura».
Armengol recordó que la gestión de José Ramón Bauzá en el frente del Ayuntamiento de Marratxí (en la legislatura 2007-2011) estuvo caracterizada por «más deuda y más impuestos», una manera de hacer que ha repetido también como presidente del Govern. «Ésta es la verdadera herencia que nos dejará», auguró.
Frente a esta forma de gobernar, Armengol reivindicó el proyecto socialista y aseguró: «Somos los únicos que podemos devolver la esperanza y la ilusión a la gente de que se produzca el cambio tan necesario en Baleares».
Entre las propuestas socialistas, Armengol se comprometió de nuevo a «implantar una renta básica para la gente que necesita el apoyo de las instituciones y que, hasta ahora, han sido olvidados por un Govern que habla de recuperación económica cuando hay un tercio de la población en riesgo de exclusión».
«Devolver la tarjeta sanitaria a las 20.000 personas a las que Bauzà ha dejado fuera del sistema sanitario y trabajar por un pacto por la educación que devuelva la paz a las aulas tras el caos creado por el Gobierno del PP», fueron otros compromisos recordados por Armengol en Marratxí.